La semana pasada os enseñamos a preparar una riquísima tarta de kiwi y queso que, por cierto, tuvo un gran éxito en nuestras redes. Esa tarta llevaba por encima una capa de gelatina de kiwi y hemos pensado: “¿Y si aprendemos a preparla en casa en vez de comprarla ya hecha?”.
La gelatina es uno de los postres que más le gustan a los más pequeños de la casa. Vale para cualquier miembro de la familia, pero a los niños le suele llamar más la atención. Además, no sólo se la comen sin pensárselo, sino que además, gracias a su gran aporte nutricional, están cuidando su organismo. Porque la gelatina de kiwi aporta muchísimos beneficios.
Beneficios de la gelatina de kiwi
- No engorda. Debido a que la gelatina contiene proteína es un alimento poco calórico. Sin considerar el azúcar y saborizantes, por cada cinco gramos aporta solo 17 calorías, es decir, alrededor de 60 calorías por un litro.
- Elasticidad de la piel. El consumo constate de gelatina aumenta la elasticidad de la piel, porque aporta alrededor de 30% de colágeno, vital para su firmeza y tono. Además, fortalece los tejidos conectivos de ésta.
- Favorece la salud de huesos. Por ser una fuente de calcio, magnesio, fósforo, silicio y otros minerales que ayudan a reconstruir y fortalecer el sistema óseo.
- Favorece la digestión. La gelatina contiene un aminoácido (glicina) que estimula el ácido clorhídrico en el estómago, necesario para la digestión y asimilación de nutrientes. También aumenta el aprovechamiento de las proteínas.
- Disminuye las estrías. La gelatina es una gran opción para prevenir la aparición de estrías, por la firmeza y elasticidad que aporta a través del colágeno.
Por otra parte, especialistas afirman que la gelatina aporta arginina, un aminoácido a través del cual el cuerpo obtiene creatina, compuesto que ayuda al crecimiento de los músculos.
Receta para preparar tu gelatina de kiwi
Ingredientes
3 hojas de gelatina sin sabor
Kiwis de Kiwi Atlántico (cantidad para un litro)
Azúcar
Preparación
Limpiar y pelar bien los kiwis.
Cortarlos por la mitad y agregarlos al vaso de la licuadora.
A continuación, licuar los kiwis hasta obtener aproximadamente una medida de un litro. Reservar para utilizar más tarde. El resultado debe tener una consistencia bastante líquida.
En una olla aparte, colocar las tres hojas de gelatina sin sabor con agua para que se ablanden un poco. Prestar atención y controlar que no llegue a hervir.
Una vez que la gelatina se encuentre más blanda, añadir el litro de kiwi licuado y el azúcar a gusto, sin quitar la olla de fuego.
Remover y mezclar bien con una cuchara de madera para que se integren todos los ingredientes.
Una vez lista la mezcla, sacar del fuego y colocarla así caliente en un molde humedecido.
Por último, meter la gelatina de kiwi en la nevera y dejar enfriar hasta la hora de servir.
(Fuente de la receta: OkDiario)
