Una receta de tarta kiwi y queso - Kiwi Atlántico

La semana pasada nos preguntábais en nuestras redes cómo preparar una rica y refrescante tarta de kiwi. El kiwi es una fruta que se adapta tan bien al postre, ofrece tantas posibilidades, que nos hemos vuelto un poco locos a la hora de elegir el dulce perfecto.

Hay muchas formas de incluir el kiwi en tus opciones dulces: batidos, smoothies , helados, mermeladas, bizcochos y, por supuesto, también tartas. Como ya hemos demostrado muchas veces en este blog, el kiwi es la fruta más versátil del mercado. Hoy nos hemos decantado por una tarta de kiwi que, estamos seguros, te lo hará pasar muy bien en la cocina y, además, no podrás dejar de comer. 

Ya sabes: compra los mejores kiwis del mercado (no hace falta que te digamos cuáles son), también todos los ingredientes necesarios, entra en la cocina e invita a las personas que mejor te caigan a probarla. ¿O te la vas a comer tú toda?

Receta de tarta de kiwi y queso Mascarpone

Ingredientes

 – 5 kiwis de Kiwi Atlántico

 – 200 gr. de azúcar

 – 250 gr. de queso Mascarpone

 – 200 gr. de azúcar

 – 220 gr. de galletas

 – 100 gr. de mantequilla

 – 30 gr. de gelatina en polvo

 – 400 ml. de nata líquida

 – 125 ml. de agua

 – 50 ml. de leche

 – 3 hojas de gelatina

 – Colorante en gel verde (opcional)

 

 Elaboración

Forrar un molde desmontable con papel de horno y reservar.

Para la base de la tarta, triturar las galletas hasta convertirlas en polvo y mezclar con la mantequilla previamente derretida.

Distribuir la masa de galleta en la base del molde y reservar en la nevera para que endurezca.

En un bol poner el queso Mascarpone, 100 gr. de azúcar y la leche y batir bien. Después incorporar la nata con la gelatina en polvo y volver a batir hasta que quede una crema homogénea.

Sacar la base de galleta de la nevera y verter la mezcla sobre esta. Volver a poner en la nevera para que cuaje.

Hidratar las hojas de gelatina en agua fría y reservar.

Pelar y trocear los kiwis. En un cazo poner los kiwis con el resto de azúcar y 75 ml. de agua. Dejar que el kiwi se deshaga y se forme una especie de confitura a fuego lento.

Poner la confitura en una trituradora y reducir. En este momento se puede incorporar el colorante verde para devolver el tono del kiwi original en crudo.

Devolver la mezcla al cazo con el resto del agua y la gelatina. Remover bien y cuando la mezcla adquiera cuerpo retirar del fuego. Dejar atemperar.

Una vez fría la mezcla de kiwi, verter sobre la capa de queso y dejar reposar en frío durante un par de horas.

Transcurrido ese tiempo ya se puede desmoldar.

 

Ahora sólo te falta una cosa. ¿Adivinás qué? ¡Disfrutar de esta estupenda tarta de kiwi que acabas de preparar! ¡Mándanos fotos!