Navidad, Navidad, dulce Navidad… ¡Y de dulce va la cosa! Llegan los Reyes y debajo del brazo, nos traen un dulce roscón de reyes.
Puede que penséis que ya conocéis las mejores recetas de postres de navidad. La verdad es que nosotros mismos hemos hecho algunas de las más ricas para estas fechas como la tarta de kiwi o el flan de kiwi . Pero si algo tenemos claro es que el día de reyes, no es concebible sin el roscón de reyes. Por eso, la receta de hoy sigue la línea más saludable de todas.
En Kiwi Atlántico siempre estamos pensando en tu alimentación y nutrición, por eso el roscón de reyes es de lo más peculiar. Lo realizamos sin huevos y sobre todo, con leche vegetal que en este caso, hemos seleccionado ¡la de soja!. Pero vamos, que si tienes preferencia por alguna otra… ¡adelante!. Y continúa hasta el final… para descubrir nuestra sorpresa en el relleno 😉
¿Qué vamos a necesitar entonces para nuestro roscón de Reyes?
INGREDIENTES PARA LA PREMASA:
- 8 tazas de harina
- 12g de levadura fresca
- 100ml de leche de soja
INGREDIENTES PARA LA MASA:
- Ralladura de naranja y limón
- 2 cucharadas de agua de azahar
- 1 cucharada de aceite de olvida
- 30ml de leche de almendras
- 50g de margarina vegetal
- 10g de edulcorante en polvo
- 25g de almidón de maíz
- 220g de harina para pan
INGREDIENTES PARA EL ALMÍBAR:
- 30ml de agua
- 30ml de leche de soja
- ¼ taza de azúcar
¡A LAS COCINAS, KIWITEROS! Nuestro roscón de reyes nos espera.
El previo.
Lo normal es hacer este paso el día antes para que esta pueda reposar y fermentar.
En un bol, disolvemos la levadura fresca en la leche a temperatura ambiente. Añadimos la harina y mezclamos bien hasta dar con una masa lo más homogénea posible.
Al acabar, lo taparemos con un paño y lo dejaremos a temperatura ambiente.
¡A por el roscón de reyes!
Añadimos lentamente al bol anterior, batiendo constantemente para que todo quede bien integrado, las ralladuras, el agua, el aceite para darle consistencia, la leche, la margarina, el edulcorante y el almidón.
Nuestro consejo es que lo dejes reposar unas dos horas para darle tiempo suficiente a la masa, que debe subir y ¡doblar su tamaño!.
Cogemos papel de cocina y la trasladamos para empezar a trabajarla. Es hora de que los más pequeños, se pongan manos a la masa ¡y nunca mejor dicho!
Dejamos que amasen, dejamos que amasen, dejamos que amasen y para que los pobres no se nos queden pegados, podemos espolvorear un poco de harina. ¡Pero poco!. No queremos que esto afecte a cómo debe quedar después nuestro roscón de reyes. Cuando acaben de amasar y juguetear, formamos un bola y haciéndole un gran agujero central, le damos forma de roscón.
¡Consejo kiwitero!
Deja reposar unos 20 minutos y mientras podemos ir haciendo el almíbar.
¡A por el almíbar!
Calentamos hasta la ebullición el agua, la leche y el azúcar. Si lo mantenemos hirviendo, llegará a coger una textura espesa.
En este momento, pincelamos con el almíbar sobre el roscón y colocamos el kiwi escarchado encima y ¡al horno!. La verdad es que hay gente que prefiere esta fruta fresca, y también es una opción. Puedes no escarcharla y servirla, por ejemplo, después de hornear el mismo.
¡O lo que es mejor!. ¿Recuerdas nuestra receta de bizcocho de kiwi. Ahí, te explicamos nuestros trucos para comprobar el punto y te contamos, como hacer con el kiwi y el horneo 😉
Simplemente decirte, que el roscón de reyes debe estar unos 30 minutos, con calor arriba y abajo, a unos 200ºC. Para dejarlo enfriar, repite el proceso del paño 😉
Y llega la hora de la verdad, la hora de lo rico-rico. ¡El relleno! Y por encima de todo… ¡sorpresa! Vamos a hacer un relleno de… ¡crema de kiwi!. No os podéis imaginar cómo de gochos nos estamos poniendo solo de pensar en este roscón de reyes.
Esta idea es tan fácil cómo… elegir el mejor relleno que más nos guste. Podemos jugar con las natas, ¿sabías que también las hay vegetales? Fijo que sí. En Kiwi Atlántico queremos cuidar hasta el más mínimo detalle así que nosotros añadimos a esa nata, ¡kiwi triturado!. Eso le dará el saborcillo suficiente para que esta puedas degustar un buen roscón de reyes a lo kiwi.
