Ya estamos en pleno otoño y con él llegan las lluvias y las bajadas de temperatura. Así que toca salir de casa bien abrigados y evitar que la lluvia nos pille desprevenidos para no pillar una buena mojadura y acabar cogiendo un resfriado.
El resfriado es una de las enfermedades más frecuentes en nuestro día a día y la mayoría de las personas la padecen incluso varias veces al año. Para evitar pasar unos días de congestión, fiebre, dolor de garganta, tos o cansancio corporal hay que tener en cuenta una serie de consejos que nos ayudarán a prevenir esta enfermedad tan molesta.
¿Qué podemos hacer para no resfriarnos?
Abrigarse bien frente al frío y evitar los cambios bruscos de temperatura y las corrientes de aire nos ayudarán en la prevención. Dormir un mínimo de siete horas diarias y realizar deporte de manera regular también servirá de ayuda para evitar resfriarnos, ya que fortaleceremos nuestro cuerpo frente a la enfermedad.
Y no podemos olvidarnos del papel fundamental de la alimentación. Cuidar lo que comemos y permanecer bien hidratados son claves para que nuestro cuerpo se muestre fuerte ante los virus. Es muy importante incluir vitaminas y minerales en nuestra dieta, presentes en frutas y verduras, para desarrollar defensas frente a la enfermedad.
El kiwi, rico en vitamina C
Cuando nos preguntan por una fruta que sirva para prevenir los resfriados, la cabeza siempre se nos va a la naranja y en segundo lugar a otros cítricos como los limones y las mandarinas debido a su alta carga en vitamina C. Pero, ¿sabes que el kiwi contiene el doble de vitamina C que la naranja? Es más, después de las guayabas y las grosellas, es la fruta que más vitamina C aporta.
Nuestro organismo no puede producir vitamina C por sí solo, por eso necesita de la vitamina C contenida en frutas y verduras. Un kiwi aporta más del 80% de vitamina C que nuestro cuerpo necesita diariamente, así que es muy importante que esta fruta se convierta en un imprescindible en nuestra dieta.
Esta vitamina C nos ayudará a absorber el hierro contenido en otros alimentos y también a sintetizar la carnitina, importante para la producción de energía y favorecerá además, a reducir la sensación de fatiga.
Y por si estos beneficios no fueran más que suficientes …¡aún hay más! El kiwi tiene muchas otras propiedades buenas para nuestra salud, ya que también nos ayuda a fortalecer nuestro sistema inmunitario, estimulando la producción de glóbulos rojos y blancos. Y, además de un alto contenido en fibra, es una gran fuente de otras vitaminas como la vitamina E, convirtiéndolo en un gran antioxidante necesario para prevenir enfermedades como el cáncer, o la vitamina K, que favorece a que nuestros huesos sean fuertes.
Si buscas un aliado perfecto para la bajada de las temperaturas, no lo dudes, ¡hazte fan del kiwi! Además de todas las buenas propiedades que aporta, es tan versátil que podemos disfrutarlo tanto en el desayuno mezclado con yogur, como a modo de postre formando parte de una buena macedonia o incluso como ingrediente de la ensalada si te gusta mezclar el sabor dulce con el salado.