De vez en cuando está bien hablar de nosotros. Os dejamos aquí el estupendo reportaje que nos han hecho en Europa Press y para el que han entrevistado a nuestro gerente José Carlos Vila.
(Fuente Europa Press)
La campaña de recogida de kiwi está en pleno funcionamiento desde hace dos semanas. En España, más del 60 por ciento de la producción de esta fruta proviene de la sociedad Kiwi Atlántico que, en un año en el que en Europa se esperan bajadas en el nivel de producción de entre el 20 y el 25 por ciento, prevé aumentar el número de toneladas que factura gracias al aumento de tierras de cosecha.
Kiwi Atlántico, con sede en Ribadumia (Pontevedra) y distinguida con el sello Galicia Calidade desde el año 2010, aglutina a 70 socios y 20 productores asociados del norte de España, aunque un 60 por ciento de las 350 hectáreas asociadas a esta empresa se concentran en la comunidad gallega, más concretamente en el municipio pontevedrés de Tomiño, situado en la comarca de O Baixo Miño.
El gerente de Kiwi Atlántico, Carlos Vila, ha mostrado su confianza en que esta campaña, que inició su proceso de recolección hace dos semanas, sea «buena» gracias tanto al tamaño de la fruta como a su calidad. Todo ello pese a que no se alcanzarán las cifras de producción registradas el pasado año, «uno de los más altos» desde que la empresa echase a andar en los años 80.
Calidad «muy buena»
Así, Vila ha indicado que el «tamaño del kiwi es mejor, la fruta es muy gorda», gracias a la «ayuda» de las condiciones meteorológicas. «Hace tres años (la cosecha) fue complicada por el tiempo. Este año, lo que llueve es continuo y con frío, por lo tanto la planta no recibe mucha agua», ha indicado.
Gracias a esto último, el kiwi producido por esta empresa mantiene el «sabor fuerte» y el alto grado de azúcar que lo caracteriza. De hecho, las pruebas de calidad que Kiwi Atlántico realiza a sus frutos arrojan que el producto de esta temporada está «bien o muy bien», ya que alcanza el 1,7 de puntuación en una tabla en la que el grado mínimo para su comercialización es del 1.
La fruta, tras salir de las fincas de los productores, llega a las instalaciones de Kiwi Atlántico, donde se almacena en «un área ventilada y cubierta para que cicatrice», ya que la planta no se corta para extraer el fruto, sino que se espera a que este se suelte. Tras esto, la fruta se etiqueta y se guarda en una cámara frigorífica para su distribución. En unos días, los primeros ‘kiwis atlánticos’ de esta temporada empezarán a estar a la venta y permanecerán en las tiendas hasta finales de mayo, cuando prevén que se finalicen las existencias.
El kiwi en Galicia
El kiwi llegó a Galicia en los años sesenta de la mano del empresario José Fernández López, fundador de Zeltia y Pescanova, quien trajo el producto desde Alemania y fundó, junto al ingeniero Carlos del Río, la primera plantación de esta fruta en la comunidad, situada en las Rías Baixas.
El clima gallego, similar al del principal país productor de kiwi, Nueva Zelanda, hace que esta tierra sea propicia para que esta planta se sienta «como en casa».
Una primavera suave, un verano cálido y un mes de octubre con precipitaciones y temperaturas bajas son, como apunta Vila, «claves» para que a finales de noviembre, cuando finaliza la recolección de la cosecha, el producto de Kiwi Atlántico alcance el grado óptimo, tanto en calidad como en cantidad. Según Vila, la bacteria Psa apenas ha tenido incidencia en la cosecha de este año gracias a que «las condiciones no fueron lo mejor» para este mal conocido como «el cáncer del kiwi», que afecta exclusivamente a la planta y no al fruto y que apareció a nivel mundial en el año 2010, eliminando plantaciones enteras de esta fruta. De hecho, una de las razones por las que Kiwi Atlántico espera incrementar «entre un diez y un 15 por ciento» su producción en su conjunto respecto a 2015 es, paradójicamente, la aparición de esta bacteria, que provocó el fin de muchas plantaciones haces unos años que se han ido regenerando a lo largo de este año.
«Kiwicultores»
Lo que comenzó como una sociedad de 30 ‘kiwicultores’ en 1988, hoy alcanza ya los 70 asociados repartidos entre Galicia y Asturias, que producen en torno al 60 por ciento de las 14.000 toneladas de kiwi que nacen en España. Sin embargo, la cantidad producida en el conjunto del Estado queda lejos de las 85.000 toneladas de esta fruta que consumen los españoles en total al año, por lo que Kiwi Atlántico no vive de las exportaciones ya que queda la demanda interior cubre con creces su oferta. «Las cadenas de distribución nacional están apostando por el producto de origen. El 70 por ciento de nuestras ventas se producen en cadenas de implantación nacional», ha afirmado Vila.
Falta de tierras de cultivo
Sin embargo, el reparto de la tierra en Galicia no beneficia a que el negocio del kiwi continúe con su expansión. «Una finca de 10.000 o 20.000 metros incluso es pequeña para producir kiwi», asegura el gerente de esta empresa, lo que choca contra la realidad del rural gallego, caracterizado por el minifundismo. A esto hay que sumar la «gran inversión» que supone iniciar un cultivo de kiwi, ya que hay que equipar la plantación con «estructuras fijas como almacenamiento de agua o filtrado», aunque Vila cree que el impulso del Banco de Terras de la Xunta puede ayudar a que más agricultores decidan sumarse a la producción de esta fruta. Con todo, desde la perspectiva del productor de kiwi, Vila ve esta iniciativa «muy mal enfocada». «Quizá para el ganadero puede estar bien, pero para nosotros no. Hablan de contratos de alquiler para cinco años. Pero no vas a hacer una inversión de 35.000 euros por hectárea sin saber si vas a renovar cuando se está en plena producción a partir de 7 años».
De este modo, Vila invita a la Administración gallega a «darle una vuelta» al Banco de Terras. Así, apunta que «la explotación conjunta de sociedades de propietarios» en la que los dueños de las fincas «además de la renta anual» obtengan «participación en los beneficios» a cambio de que los alquileres de las tierras se produzcan a «20 años» puede ser una solución para solventar la falta de tierras para los kiwis gallegos.